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Café Colombiano
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Lo pedí un lunes y el miércoles ya lo tenía en casa. El aroma al abrir la bolsa fue espectacular. Me gusta tomar café mientras leo o trabajo desde casa, y este ha sido, sin duda, una grata sorpresa. Muy recomendado."
No soy experta, pero sé cuándo un café es bueno. Este sabe casero, suave, pero con mucho sabor. Me lo tomo en las mañanas sin azúcar y me levanta el ánimo. Y encima es más barato que otros que he comprado que no saben a nada.
Probé el café en grano de Café Don Alonso y quedé encantado. Tiene cuerpo, sabor y una acidez equilibrada. Ideal para quienes disfrutamos el café de verdad. ¡Apoyar marcas colombianas con este nivel de calidad vale totalmente la pena!
Buenísimo. Me llegó rápido y en cuanto lo abrí supe que era otra cosa. ¡Ese olor a café fresco es adictivo! Lo que más me gusta es que me lo tomo sin azúcar y me sabe buenísimo. Y cuesta menos que muchos cafés de “marca”
Soy exigente con el café y este me sorprendió. Buen balance, aroma intenso y una textura deliciosa al prepararlo en prensa francesa. Lo llevaré a la oficina para que mis colegas también lo prueben.
Lo pedí para la casa y ahora hasta mis papás lo prefieren. No empalaga, no es ácido, y lo mejor es que uno lo puede tomar sin nada más. Súper recomendado, sobre todo por el precio.
Lo probé por recomendación y me gustó tanto que ya lo estoy regalando a mis amigos. Es un café que uno puede tomarse sin azúcar, porque el sabor lo tiene todo. Y Lo mejor de todo, el precio 🙂
Tenía miedo de probar otro café diferente al de siempre, pero me encantó. Se siente natural, sin cosas raras, y lo mejor es que no me hace daño al estómago como otros. Me sorprendió que fuera tan bueno y más barato que otros cafés de “especialidad”.
Uno cree que para tomar buen café hay que pagar un montón… pero este me dejó loco. Huele delicioso, sabe mejor y me encanta porque me lo tomo sin azúcar y no me amarga. ¡Qué buena sorpresa!
¡Qué café tan bueno! Me lo regalaron y ahora soy yo el que lo regala. Me encanta que no hay que echarle azúcar porque ya sabe rico por sí solo. De verdad, no tiene nada que envidiarle a los cafés caros.
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